Trabajé allí en una empresa nacional que hoy afronta decisiones difíciles, y aquí también hay asuntos que conversar, lo que ahora o más adelante haré. Es importante tener en cuenta que mi visión no fue desde Santiago, sino desde la Cuarta Región, en una zona que no es el centro económico del país.
Por ahora, quisiera simplemente enumerar algunos puntos destacables, más o menos como me vienen a la cabeza en este momento. En todos los casos, es necesario dejar a salvo las excepciones: lo que es la regla, siempre tendrá excepciones. en los casos en que valga la pena, apuntaré el punto adverso. Adelante:
- Confiabilidad en las decisiones tomadas. Esto debiera ser lo normal, y sin embargo, necesito destacarlo. Una vez que algo fue acordado, se cumple. Extiéndase esto a la legislación, a la concertación de contratos, a cualquier cuestión formal. Acostumbrado a la informalidad y falta de cumplimiento, llevado a extremo en la inseguridad jurídica, esto es un valor para mí. Saber que existe continuidad y respeto por las decisiones acordadas, permite proyectar estrategias de larga duración y progresivas, algo que es justamente un fenómeno que cualquiera que siga la evolución chilena tiene que notar.
- Responsabilidad, que es base de la confiabilidad seguramente...En general, cada persona cumple su obligación; lo puedo decir notablemente en los funcionarios. Solemos identificar a "funcionario" con un personaje de importancia en el gobierno, pero en Chile un funcionario es toda la línea de personas actuantes en un área: me acostumbré a hablar de los funcionarios de la empresa, para identificar a todas las personas que trabajan en ella, desde los gerentes hasta los empleados de mostrador. Si le extiendo la connotación que se esperaría de la palabra aplicada a un alto cargo, tenemos el sentido en que cada uno toma su responsabilidad. Un empleado de la administración conoce su obligación, y la cumple. No es que sean técnicos especialistas; puede tratarse de una persona simple, incluso que cometa errores; pero hace su trabajo, una tarea tras otra, sin indolencia, incluso con celeridad (una frase que aprendí allí es "lo hago al tiro", es decir, "lo hago inmediatamente"...) Los trámites se completan en tiempos razonables, las colas avanzan. Como en otros países, normalmente si has cometido una infracción en la carretera, pagarás la multa sin chistar, sin "transa", salvo que el procedimiento lo permitiera. Cuando en un país puedes confiar en que el que atiende tu trámite no obra con preferencias, o busca un "estímulo", puedes estimar tiempos con realismo, y competir en un marco más transparente. Responsable y atento a sus normas es el empleado de Registro Civil, el carabinero, el maestro, el peón que recoge la cosecha en el surco, el chofer del transporte público...Hay un aspecto en el que la responsabilidad tiene especial interés: la educación, que comentaré por separado.
- A estos dos puntos anteriores, debiera moderarlos con dos antivalores que los limitan:
- una comprensión dogmática de la obligación asignada, que puede llevar a atascamientos en la resolución de un problema. He pasado en ocasiones por episodios de poca flexibilidad para resolverlos, sea en trámites en la esfera del Estado, como en la actividad comercial.
- poca disposición por considerar que la función es un servicio, y que el cliente o solicitante deben ser escuchados y atendidos. Las organizaciones de defensa del consumidor no tienen, en la medida de mi experiencia, un peso importante, y el consumidor medio es sujeto en ocasiones de procedimientos que serían inaceptables en otros lugares.
- Preocupación universal por la educación. Aunque los mismos chilenos ponen en duda la calidad de su enseñanza (y mis hijos lo experimentaron al pasar al sistema español), sin embargo, el esfuerzo puesto en mejorar, seguramente dará frutos en el futuro. Tuve experiencia directa de la enseñanza media y universitaria, y puedo asegurar que existe un esfuerzo para ampliar la base social de la educación, y el equipamiento para el estudio, desde la disponibilidad de material, hasta la extensión progresiva de medios avanzados de comunicación. Como en Argentina, observé el seguimiento de los niños en reuniones periódicas de evaluación con los padres, pero a diferencia nuestra, el paso de la enseñanza media a la superior es exigente, planeado, y tomado colectivamente casi como una tarea nacional. Existe un período de dos años que son fuertemente orientados a la preparación del ingreso a la Universidad. El ingreso, por otra parte, requiere aprobar una prueba de aptitud, y las posibilidades de admisión a una carrera son proporcionales al puntaje obtenido: los postulantes se anotan en una lista para su preferencia, y son elegidos por su puntaje. Para esta prueba trabajan prácticamente todos los estudiantes de nivel medio, durante estos dos años, con evaluaciones periódicas, y seguimiento de los padres. Es un objetivo fundamental del noventa por ciento de los estudiantes, y, para la época de exámen, es seguida por todos los medios de difusión, porque también se convierte en una prueba del rendimiento de los establecimientos de enseñanza. Doy fe, por mi hijo y por todos sus compañeros, del esfuerzo que ponen para aprobar, y para llegar a entrar al establecimiento que se han propuesto. Y en esto se incluyen también estudiantes y familias humildes, que deben hacer un gran esfuerzo económico para poder seguir adelante, porque la enseñanza superior no es gratuita. Luego, la dedicación no termina al ingresar, sino que produce resultados. Compartí actividades laborales con colegas de formación superior o técnica, capaces y dedicados, aunque a veces su puesto de trabajo no fuera remunerado acorde a su aptitud (Pero eso es un mal universal, ¿no es cierto?).
- El punto negativo del manejo de la educación es que la Universidad estatal no es gratuita, y, en algunos casos, aún más cara que la privada. Existe un sistema de becas que se ha ampliado (desconozco si esto cambió en los últimos meses, con el nuevo gobierno), pero el costo se convierte en un limitante importante en un país donde la clase media tiene sus ingresos muy comprometidos, y las familias con bajos ingresos son numerosas.
- Agilidad del Estado: Conviven sistemas avanzados y anticuados...particularmente la informatización de la administración es mucho más amplia que la que dejé en Argentina. Por nuestra experiencia personal, obtener una partida de nacimiento, un certificado de antecedentes, un estado de la propiedad de un automóvil, son tareas inmediatas: se obtienen en la ventanilla en que se solicita, en el tiempo que se tarda tomar los datos. El seguimiento de un trámite, el conocimiento del pago de rentas de una persona, son actividades bien logradas. La Tesorería puede cruzar los datos de pago de impuestos con bastante precisión, y puede determinar con bastante acierto la exactitud del pago, en base al seguimiento de las actividades de facturación, movimientos bancarios, y actividades notariales. Todo el mundo realiza su declaración de impuestos, y, eventualmente, recibe un cheque de devolución por un ajuste en el volúmen de pago efectuado. Dejé Chile en momentos en que comenzaba a implementarse la factura electrónica, con un conjunto de items a ser informados en forma estándar, de tal forma que el movimiento comercial será controlado más ajustadamente. Muchas entidades gubernamentales disponen de sitio web con información para facilitar las gestiones de los usuarios; en particular, TrámiteFacil ofrece un punto único de consulta sobre los más importantes trámites administrativos en el estado. Muchos de éstos se pueden iniciar por Internet, particularmente la declaración de impuestos. El documento de identidad posee un buen nivel de seguridad, con una identificación electrónica que permite que, si es robado o perdido, pueda ser bloqueado para impedir su uso fraudulento. El bloqueo es instantáneo al ser denunciado en un Registro Civil. El equipamiento informático es extendido, y , como digo, tiene contenido, no se trata de tener un computador con un procesador de texto y una hoja de cálculo.
- En contrapartida, algunas decisiones son lentas y burocráticas; mis hijos por ejemplo, esperaron meses para certificar sus estudios, y en algún momento estuvimos en riesgo de perder los documentos a homologar. En general, a pesar de que Chile pone el acento en los convenios comerciales internacionales, y se propone atraer capital (mientras vivíamos allí se proponía como "Plataforma de Negocios para América Latina"), las gestiones de radicación de un extranjero no son muy fáciles de llevar adelante: no sólo es dificultoso completar un trámite de radicación, sino que, aunque tenga papeles transitorios, no podrá operar comercialmente con facilidad hasta que no tenga su documento de extranjero: no es posible abrir una cuenta bancaria con facilidad, ni comprar propiedades, o realizar operaciones de crédito (abriré un punto sobre "Chile y el mundo"). Un aspecto que es una traba frecuentemente, es el propio sistema político organizativo: Chile es un país fuertemente centralizado, con escasa autonomía regional, donde las decisiones de peso se toman en Santiago. Así, un proyecto puede avanzar si se inicia desde Santiago, pero será más dificultoso desde Regiones.
- Hay más...pero será en una segunda oportunidad. Quizá este balance sea el primero que motive comentarios, acotaciones y respuestas de quienes lo lean...eso es lo que esperaría...
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